Hola a todos.
A los seres humanos nos gusta la comodidad en todos los aspectos de la vida… una educación que no nos exija mucho desvelo, un trabajo monótono para no esforzarnos demasiado, o ropa negra para no pensar que vestir cada día.
Tomar riesgos nos da miedo, nos sudan las manos y sentimos un aire frio recorrernos la espalda. Nos preocupa lo que piensen las demás personas si sobresalimos de alguna manera. Si salimos de los parámetros establecidos y hacemos algo considerado loco.
Pero… la satisfacción de hacerlo es tan grande que inicia desde antes de ejecutar nuestra decisión. Las mariposas en la panza semanas antes de hacer ese viaje, horas antes de una entrevista, minutos antes de entrar a esa sala vistiendo colores estridentes en una ciudad llena de trajes corporativos grises. Esa adrenalina merece la pena de arriesgarnos cada vez que podamos.
Tomar riesgos y salir de la “mal llamada” zona de confort es un ejercicio que deberíamos hacer con regularidad para ponerle picante a nuestra vida, y quizá aportar un poco de material a quienes mueren por hablar de los demás. A veces puede ser llevar un labial rojo indecente a la oficina, dejarte el cabello afro, renunciar a tu trabajo, aventurarte a lo desconocido, o combinar rosado con amarillo mostaza (como en mi outfit).
Permitámonos el placer de arriesgar algunas veces, porque si salirnos del cuadro nos hace felices, entonces sólo eso importa.
Nos vemos la próxima semana.
***
Hello everyone.
We humans like comfort in all aspects of life… An education that does not require much concern, a boring job to not trying too hard, the black clothes to not think what dress every day.
Taking risks frightens us, our hands are sweaty, and we feel a cold air running through our backs. We care about other people think if we are out of the box in some way. If we get out of the parameters and do something considered crazy.
But… The satisfaction of doing so, is so great that it starts from before executing our decision. The butterflies in our tummy weeks before a trip, hours before an interview, minutes before entering that room
wearing vibrant colors in a city full of grey corporate suits.
Taking risks and getting out of our comfort zone is an exercise that we should do regularly, in order to add spicy to our lives, and maybe bring some material to those who die to talk about others. Sometimes it can be to wear an indecent red lipstick to the office, leave afro hair, quit of your job, or mix pink with yellow mustard (as in my outfit).
Let us the pleasure of risking sometimes, because if that will make us happy, then only that matters.
See you next week.